Son días raros. El ritmo frenético habitual ha frenado en seco. Los memes más disparatados saltan de un móvil a otro, y el delirio comienza a afectar a muchas cabezas confinadas que, después de reclamar durante tanto tiempo, precisamente eso, tiempo para sí mismas, descubren que han desaprendido lo que hacer con él, si los…