El 1 de enero se conmemora el Día del Dominio Público. Con la llegada de 2017, el trabajo literario del gran número de escritores fallecidos en 1936, año del estallido de la Guerra Civil española, ha pasado a estar libre de derechos de autor. En total, la labor cultural de 377 personalidades está a disponibilidad de toda la sociedad, sin coste, en la Biblioteca Nacional de España (BNE).
Cuando una obra ingresa en la categoría de dominio público expiran sus derechos patrimoniales, aunque permanece intacto el derecho al reconocimiento de su autoría. La legislación que regula estos códigos varía dependiendo de cada estado. En nuestro país, como informa la Biblioteca Nacional, “los derechos de explotación de una obra subsisten 70 años después de la muerte del autor y se computan desde el 1 de enero del año siguiente al de la muerte o declaración de su fallecimiento”.
La ley en la mayoría de países también marca este plazo de tiempo para que un trabajo entre a formar parte del dominio público. No obstante, en virtud de la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual de 1987, en España se marca la excepción de que los 70 años únicamente son válidos para los fallecidos posteriormente al 7 de diciembre de dicho año. En el caso de los perecidos con anterioridad, el rango de tiempo tiene que alcanzar los 80 años y un día tras su muerte, siguiendo la Ley de 1879.
El drama cultural de 1936
Ochenta años han pasado desde el inicio de la Guerra Civil española (1936-1939), un conflicto que acabó con la vida de cientos de miles de personas. Para el panorama literario fue trágico, grandes figuras intelectuales de la época, con independencia de su ideología y actividad política, murieron durante esos años bélicos.
Ochenta años desde que autores como Federico García Lorca fueran asesinados a costa del conflicto. Trascurrido el plazo establecido por la legislación, la obra del poeta español por excelencia del pasado siglo está a día de hoy a disposición de toda la ciudadanía en la Biblioteca Nacional de España.
En 1936 se escribió el final de otros legados prolíficos del S.XX, virtuosos de las letras como Valle-Inclán, Miguel de Unamuno, Ramiro de Maeztu, Pedro Muñoz Seca o Manuel Bueno han pasado esta semana a formar parte del dominio público. Llaman la atención nombres como Primo de Rivera o Ramiro Ledesma Ramos que, siendo líderes políticos del fascismo español, se afanaron en construir su propia faceta literaria.
Únicamente dos autoras ingresan en esta categoría de la Biblioteca Nacional. Se trata de un compendio de conferencias aunadas en el ejemplar Opiniones de mujeres, de María Domínguez y una investigación de Zea-Bermúdez acerca de Cervantes, a quien le dedicó varios artículos. A pesar de la ausencia de mujeres en el listado de literatos abatidos al inicio del conflicto, no escasearon las eruditas femeninas que, en un mundo aún de hombres, aportaron riqueza cultural a la época.
Digitalización para eternizar la obra de los escritores nacionales
Además de pasar a disposición pública, las obras de otros tantos universales que murieron en 1936 se encuentran
ya digitalizadas en aras de ser “editadas, reproducidas o difundidas” por y para toda la sociedad. La entidad española ofrece un listado con los autores cuyo trabajo se ha incluido en los fondos de la Biblioteca Digital Hispánica y que pueden ser consultados desde cualquier parte del mundo.
Durante años, la Biblioteca Nacional Española ha cumplido la misión de digitalizar legados intelectuales que cada enero cumplían el plazo establecido por la ley para constituir el dominio público. Con la entrada del nuevo año, aumenta considerablemente este listado debido al coste de vidas que se cobró la última guerra española.
Con el proyecto de digitalización de la Biblioteca Nacional se incrementan las posibilidades de difusión del patrimonio cultural español aportado por los grandes literatos del S. XX. Además, durante 2017 la entidad dedica un espacio web a los autores fallecidos al inicio de la Guerra Civil. Desde dicho portal se ofrece una semblanza de la biografía de las personalidades, así como enlaces a otras páginas de interés, a fin de poner de manifiesto las particularidades de su vida y obra.
