Siempre me he imaginado la satisfacción que debe suponer saber dibujar. Enfrentarse a un folio en blanco y ser capaz de transmitir ideas y pensamientos a través de los trazos rectos y curvos, los sombreados, los volúmenes… Para quienes no vamos mucho más allá del retrato que forma el seis y el cuatro, contemplar un dibujo que sobresale del papel y nos observa desafiante; una pintura que transmite emociones que traspasan el lienzo o ilustraciones que completan a la perfección el significado de un texto o cuentan historias por sí mismas, supone casi un acto divino.
Y de lo divino y lo humano hemos charlado con una ilustradora que ha convertido su forma de expresión en profesión. Hablamos de Crystina Maturana, una profesional con más de una década de trabajo a sus espaldas, que ha sabido conjugar la ilustración, el diseño y la producción de moda para dar forma a su trabajo: un cóctel de ilustraciones elegantes y coloristas que nos acercan los flashes y la sofisticación del mundo de la moda.
¿Cómo comenzaste en esto de la ilustración?
Siempre he dibujado, desde pequeña, aunque desde un punto más íntimo, porque me daba vergüenza enseñar lo que hacía…
Más tarde, centré mis estudios en la moda y aunque la creatividad estaba presente en mi día a día, la ilustración se quedó relegada de nuevo a la intimidad. Tras un parón obligado de trabajo, comencé a ilustrar de nuevo hace un par de años y empecé a enseñar mi trabajo en redes sociales. Para mi sorpresa, me surgieron varios proyectos interesantes y esta nueva situación me hizo replantearme mi futuro … Así que, puede decirse que empecé por casualidad y sin buscarlo.
Hoy en día, me siento una afortunada de poder trabajar en lo que me gusta, puedo compaginar mis dos pasiones, la ilustración y la moda, sin que sean dependientes una de la otra. Pienso que estamos en un mundo donde nos obligan a especializarnos en un solo camino, y los creativos tenemos que luchar mucho para que no nos encasillen y poder así abrirnos a proyectos nuevos y diferentes que nos permitan evolucionar.
¿Crees que es complicado hacerse un hueco en el mundo de la ilustración? ¿Cuál ha sido tu experiencia?
Creo que es fácil darse a conocer, tenemos muchas más herramientas para mostrar nuestro trabajo y podemos crear un escaparate al que todo el mundo, profesionales y particulares, pueden acceder en cualquier momento. Un escaparate que, además, nos permite interactuar.
Pienso que lo difícil es acceder a proyectos; cada vez hay más filtros entre los ilustradores y los proyectos, lo que hace que mucha información y posibilidades se queden fuera. Hay que trabajar mucho y duro, ¡como en todas las profesiones! Pero en esta profesión, el trabajo duro merece la pena.
Me gustaría decir que muchos ilustradores somos autónomos y no estaría nada mal que pensaran un poco más en este gremio, ya que gran parte de la inestabilidad laboral que nos encontramos en ciertos momentos no viene del sector profesional en sí, sino de factores externos.
¿Qué otras ilustradoras e ilustradores te inspiran?
Soy seguidora de muchos ilustradores/as y de estilos muy diferentes. Siempre me gusta ver una ilustración de Rene Gruau o Lautrec y me encantan los carteles vintage de publicidad, dónde a golpe de imagen recibes mucha información.
Por supuesto, sigo y admiro a muchos ilustradores nacionales como Alex de Marcos (Mundopiruuu), Maria Hesse, Esther Gili, Conrad Roset, Jordi Labanda o Arturo Elena, entre muchos otros.
“Que te reconozcan por tu estilo es una manera de saber que vas por el buen camino”.
Muchas de tus ilustraciones tienen una estética de moda muy marcada, ¿es tu principal seña de identidad?
Sí, es una estética bastante personal que siempre aparece en los trabajos que realizo, incluso cuando dibujo ilustraciones infantiles o publicitarias, ese sello está ahí.
Soy una gran defensora del estilo personal, durante muchos años me obsesioné con la estética de otros y lo que en teoría “era bonito” y lo que no, afortunadamente en un momento determinado esas barreras se vinieron abajo y la seguridad en el trabajo propio salió a la luz.
Los ilustradores tenemos que evolucionar, es lo bonito de esta profesión, enfrentarnos a nuevos retos que solucionar manteniendo un estilo que nos identifique. Que te reconozcan por tu estilo es una manera de saber que vas por el buen camino.
“Durante el proceso creativo hay momentos de caos o de inseguridad y otros de luz. Al trabajar con uno mismo hay que buscar el equilibrio entre la exigencia y la recompensa.”
¿Cómo definirías el proceso creativo que sigues cuando te enfrentas a cada nuevo proyecto?
Ante los nuevos proyectos, siempre comienzo por una fase en la que boceto las primeras ideas y apunto las impresiones; posteriormente llega una fase de reflexión en cuanto a estilo, trazo o técnica a llevar a cabo, y finalmente empiezo a trabajar en el proyecto. Por supuesto, durante el proceso tengo bastantes manías adquiridas, hay momentos de caos o de inseguridad y otros de luz. Al trabajar con uno mismo hay que buscar el equilibrio entre la exigencia y la recompensa.
Los procesos creativos pueden ser muy diferentes unos de otros y hay que estar preparada para gestionarlos, la experiencia te ayuda a que todo sea más fácil.
¿De qué forma han evolucionado tus ilustraciones?
La mayor evolución que he notado ha sido la libertad y seguridad. Al principio estaba muy cómoda y segura en mi zona de confort, estaba más centrada en la ilustración de moda. Arriesgarme a realizar otros proyectos ha hecho que mi ilustración sea más segura y libre. He crecido a nivel técnico y también personalmente, la necesidad de trasmitir con la ilustración se ha unido con la estética y mis trabajos ahora tienen mayor contenido.
¿En qué novedades estás trabajando?
Acabo de terminar las ilustraciones para un libro que saldrá dentro de poco; ha sido una experiencia increíble y espero poder colaborar con otro a corto plazo.
Soy profesora y la vuelta a las clases siempre me da mucha fuerza, porque el contacto con las ilusiones de los alumnos y poder ayudarles a crecer es algo que me motiva mucho.
El resto de los días los compagino entre el diseño de estampados y prendas para empresas textiles con las que colaboro y con ilustraciones para agencias y editoriales.
Estoy buscando un lugar donde poder realizar mi primera exposición, pero llevo meses buscando el sitio ideal y todavía no me decido, espero poder encontrarlo en breve.
Conoce más a Crystina Maturana en:
www.instagram.com/cristynamaturana/